por Fanny Carrillo
Esta semana entrevistamos a uno de los profesores de la Academia de Matemáticas, Jorge Andrés Rosas Ávila, el cual nos compartió parte de su vida personal y laboral. El profesor nos recibió con amabilidad en su cubículo para la entrevista.
Nos dijo que estudió la licenciatura en Física, en la Facultad de Ciencias de la Universidad Autónoma de México y después estudió la maestría en Matemáticas también en la UNAM. Nos dijo que decidió estudiar Física porque le llamó mucho la atención entender los fenómenos de la naturaleza, el universo y la formación de las galaxias; la astronomía lo llevó a su primer acercamiento con la ciencia. Investigando, en ese entonces se dio cuenta que lo que le correspondía era estudiar Física, después con el transcurso de los semestres en la carrera se dio cuenta de que también tenía un gusto por las matemáticas y después fue como decidió estudiar la maestría en matemáticas.
El profesor llegó al plantel en septiembre del 2011. Antes de laborar en este plantel había trabajado para el instituto del sistema semiescolarizado, donde en una ocasión salió la convocatoria para ocupar la plaza en el sistema escolar. También nos compartió que a él le gusta mucho su trabajo y lo que hace. Nos dijo que sus pasatiempos favoritos son jugar beisbol, el cual practica dos veces a la semana, los paseos en bici, los cuales hace regularmente los fines de semana y también tocar la guitarra, aunque entre risa nos dijo que no era muy bueno. (Lo que es padre saber, ya que vemos que tiene interés por lo que le gusta a pesar de aún no lograr lo que busca respecto de la música).
Después le preguntamos cuál ha sido una de las cosas que más le gusta recordar de su vida académica y laboral, él nos dijo que una de las cosas que más le gusta recordar son los viajes que ha realizado, de hecho uno de sus pasatiempos favoritos también es viajar, aunque no siempre le es posible. Nos dijo que le gusta conocer lugares; tiene muchos recuerdos muy bonitos, por ejemplo, la vez que viajo a Cuba, Perú e Italia. Pero lo que más le gusta recordar es la primera vez que cruzó el Océano Atlántico, viajó 12hrs, dice que le gusta recordar ese viaje porque lo realizó solo ya que su novia lo estaba esperando en Europa para dar el paseo juntos. (El profesor sonreía mientras platicaba sus experiencias, lo que nos hizo ver que realmente fueron bellos recuerdos). El hecho de abordar el avión, todo el trayecto para él fue una experiencia.
En lo laboral nos dijo que uno de los mejores recuerdos como profesor ha sido cuando un alumno le pregunta cosas que uno no espera, nos contó que hace tiempo tuvo una alumna de 5to semestre, quien después fue su alumna en la materia optativa y nos dijo que le hizo una pregunta en la cual se requería de bastante herramienta de semestres ya avanzados, entonces dijo que a él le dio mucho gusto.
También le preguntamos acerca de sus aspiraciones personales y académicas, nos dijo lo siguiente: “Uno no está exento de aspirar a cosas y es parte de la vida, así que una de las cosas que aspiro lograr es tener mi propia casa, creo que es algo que a muchos nos interesa dentro de lo material y dentro de lo profesional me gustaría seguir desarrollándome en mi área e ir preparándome justo en el ámbito de la docencia”.
Otra de las cosas que le preguntamos al profesor fue acerca de su relación con los alumnos. Nos dijo que esto cambia cada semestre, por lo cual se ha encontrado con todo tipo de relaciones: “de los que terminan siendo de alguna manera mis amigos, porque en realidad nunca se da una relación por la diferencia de edad y por el papel en el que me encuentro y en el papel en el que están ellos”.
También nos platicó que a veces existe una ruptura entre los alumnos, nos dijo que a veces tiene que ver que con los alumnos que trabaja, la mayoría son adolecentes. Nos expresó que él también debe de cambiar y ser un poco más sensible ante las necesidades de los estudiantes: “Eso aunque no parezca, créanme que sí lo intento. Tratar de meterme en la cabeza de los estudiantes, no confundir con ser maestro barco o no realizar bien mi trabajo, así que he tenido de todo tipo de alumnos que ya al haber terminado la prepa siguen teniendo contacto conmigo e incluso a veces me buscan, porque a veces tienen preguntas que hacerme; hasta los que a medio semestre ya no me quieren ver y es como parte del trabajo, no es siempre igual, siempre uno está pensando e innovando cómo puede llevar de mejor manera la relación que tiene con los alumnos”.
Para concluir la entrevista, le preguntamos qué podría decirle a sus alumnos respecto a su materia y a la vida, nos dijo: “Me gustaría que se quiten esa idea de la cabeza de que las matemáticas son complicadas, que no sirven para nada. Estamos inmersos en una cultura, para llamarla de alguna manera o en una dinámica en la que se piensa o nos hacen creer a todos que las matemáticas son muy difíciles o que son súper aburridas, así que les diría a mis alumnos que sí traten de quitarse esa idea. Sí se requiere de concentración y tiempo de estudio, pero las matemáticas son como cualquier otra disciplina”.
Y respecto a la vida nos dijo: “La vida se va construyendo a base de experiencias y hay muchas cosas que uno no aprende hasta que no las vive, entonces lo que le puedo decir a los alumnos es que aprendan de las experiencias. Que esperen todo lo bueno y todo lo malo que les pueda dar la vida y que recojan todo eso para ir construyendo su futuro”.